Por Corriente Estudiantil Obrera
En medio de la actual crisis sanitaria que se agudiza cada vez más en nuestro país, miles de estudiantes de San Marcos y de otras universidades públicas siguen necesitando ayuda urgente para la realización de sus clases virtuales. Asimismo, esta falta de acceso en el marco de esta pandemia, tal como lo expresan los residentes externos de San Marcos, no es el único problema que azota a muchos estudiantes, sino también la falta de sustento de las necesidades básicas como la alimentación, la vivienda e incluso el tema laboral.
Se prioriza lo económico y no lo académico
Además, las autoridades de San Marcos, ante la falta de solución para con el acceso a la educación virtual, la contratación docente, la matrícula, el horario de los cursos, entre otros procesos administrativos más, siguen mostrando a toda la comunidad universitaria otras prioridades (avaladas por la ley universitaria 30220) que no son de hecho académicas. Sino más bien preocupaciones económicas tal como el de mantener los números de la caja fiscal de la universidad en azul, lo cual vulnera directamente un fin y una función básica de toda universidad: la de priorizar el desarrollo profesional de los estudiantes. Que, a pesar de que se menciona inclusive en la ley universitaria, se pone por delante otros artículos que ponen de manifiesto el carácter privatista de esta así como el carácter autoritario de la misma, de ahí que han sido completamente legales todas las medidas arbitrarias que se han venido dando en distintas facultades y desde el rectorado. Un ejemplo claro de ello fueron los planes de adecuación para las clases no presenciales exigidos por la SUNEDU. Donde, en varias facultades, no hubo ni siquiera transparencia.
Situación crítica para miles de jóvenes y sus familias
Como se dijo líneas atrás, los problemas no solo se reducen al ámbito universitario. Hay otros ámbitos también que pueden vulnerar a más jóvenes de los que hoy existen. Pues, frente a un gobierno que tiene la gran orientación de volcar la crisis a los sectores más pobres del país, más estudiantes junto a sus familias podrían ser afectados. Solo basta ver la mínima inversión extra por parte del gobierno dado a la educación y a la salud en relación a la tremenda ayuda que ha desembolsado el gobierno a las grandes empresas del país. Donde aquellas, juntas, no llegan ni al 10% de todo el dinero que este gobierno ha soltado a estas últimas.1
Simultáneamente, cifras como el de la suspensión perfecta de labores, con más de 200,000 trabajadores afectados hasta inicios de mayo según el MTPE, como la de los cientos de trabajadores que tienen el perverso cese colectivo, como la de los infectados que sobrepasan los 200 mil, como el lucro con la salud por muchas clínicas o farmacéuticas del país, entre otros datos terribles para la población pobre, nos dan un panorama de lo que está sucediendo en nuestro país y de los posibles golpes que están recibiendo y que recibirán muchos más jóvenes universitarios y familiares suyos. Por tal razón, sin duda alguna, urge una ayuda inmediata integral para que no solo nadie trunque sus estudios ni sea excluido por no tener los medios económicos, sino también para que todos se mantengan vivos y sanos. Pues, es una realidad que muchos de ellos solventan sus propios estudios tal como lo hacen miles de estudiantes técnicos, y que ahora, debido a la actual crisis, se están quedando sin empleo. Así lo indicó, por ejemplo, Julio Cárdenas, presidente de la Asociación de Institutos y Escuelas de Educación Superior (ASISTE PERÚ), que, más de 65,000 estudiantes no se llegaron a matricular en este semestre y que además calcularon que, en los próximos meses, la cifra podría llegar hasta 170,000 estudiantes más. Una crisis en la educación.
Exigir más presupuesto para la educación y para los demás servicios básicos
Nada de lo que está pasando es casual. Todo es producto de las grandes desigualdades que este sistema y este modelo económico ha causado. Y precisamente uno de los sectores donde se está viendo eso, es la educación. Es por ello que hoy más que nunca tiene que haber un aumento presupuestal para la educación y un estudio socioeconómico integral orientado a identificar a los estudiantes más vulnerables y brindarles todo el apoyo necesario, estudio que no debe ser usado para otros fines. A su vez, para que haya éxito en estas demandas, tiene que haber una amplia unidad de los trabajadores y estudiantes para luchar juntos por una educación sin excluidos y por mejores condiciones de vida para todos. No podemos permitir que en medio de toda esta crisis sanitaria se abandone a cientos de estudiantes a su suerte, menos aún permitir que las autoridades universitarias y el gobierno nacional prioricen “problemas económicos” que las necesidades básicas de la juventud y de los trabajadores.
¡Educación sin exclusión!
¡Evaluación socioeconómica ya!
¡Ayuda integral para todos los estudiantes que lo necesiten!
¡Más presupuesto para la educación y para los demás servicios básicos!
¡Por la unidad de los estudiantes y los trabajadores!